M E S T E V I

Lo siento, tengo que reconocerlo, el tener una predilección o debilidad de entrega hacia un escritor determinado, hace que te entregues a él, desde luego antes incluso de leerle o empezar a escucharle.- Pienso que es un por un aquel, ¡este va a decir lo que pienso yo! Hecho que además sucede leyendo sus líneas escritas o escuchando sus palabras.-Sin estar en todo de acuerdo ni mucho menos en la mayoría de sus reflexiones y planteamientos de realidad social y política, aderezada y reforzada con referencias al pasado histórico de los españoles, que eso es incuestionable.-Tengo que reconocer que no me decepcionó en absoluto.- Y me quedo con hambre de dialogo, de preguntas y respuestas, pero lo que sí hice, fue hacer mías algunas reflexiones certeras que defendería ante cualquiera que las cuestionase.- La única posibilidad de cambio social, pasa por invertir sin límite en la educación, ya que marginando y liquidando el acceso a la misma, nos estamos cargando la posibilidad de educar e

Credit Suise en un informa anual, dedica a España una reseña al crecimiento experimentado de 47.000 nuevos millonarios.-Asombroso, e impactante, mientras se aniquila la clase media vía recortes así como el acceso digno a sanidad y educación, se acentúa la brecha socioeconómica entre las rentas más altas y las más bajas, aparecen estas cifras que demuestran según Montoro que la economía repunta.- Si además esos más de 500.000 parados fraudulentos que insolente y falsamente denunciaba la vicepresidenta del Gobierno, sin el más síndrome de sonrojo en su cara, son reducidos en sus prestaciones como propone un tal Feito, lumbrera económica del laboratorio de ideas de la CEOE, se alarga la edad de jubilación como mínimo a los 70 años exigiendo un mínimo de 40 años cotizados, se conseguirán de aquí a 10 diez años máximo dos grandes logros.- Reducir sustancialmente los emolumentos de cobro de los parados, y hacer casi imposible el hecho de que un jubilado llegue a cobrar el 100% de su pensió

El aproximarse a los 54 años, produce muchos daños “colaterales” además de los inherentes a la fecha de nacimiento del carnet de identidad.-Uno es tratado de “usted” con más frecuencia de la que a menudo desearía; pero es el menor daño emocional comparado con el despido y jubilación de compañeros de trabajo, que producto de ésta dichosa crisis, van abandonando el barco laboral, a nada que las condiciones merezcan la pena, y si no como antídoto de saneamiento mental, sean cual sean las mismas, que en la mayoría de ocasiones no son elegibles.- Compañeros de durante muchos años los has tenido más o menos cercanos y a los que ahora dices adiós, sabiendo la pérdida de valor que supone por su experiencia, en la mayoría de las empresas en las que son despedidos.- Poblaran las calles junto a otros jubilados de años atrás, ocuparan viajes del Inserso y otras promociones para mayores de 55, pero cada uno de ellos tendrá la inevitable sensación de haber sido expulsado del mercado laboral,