Si hay algo que nos define como pueblo, es la capacidad que tenemos los aragoneses, de practicar la “sociología grotesca” frase definitoria que emplea un amigo, para nombrar la oportunidad que ejercemos como ciudadanos, para crear interrelaciones sociales, con desarrollo del intelecto, el análisis baturro, campechano, directo, socarrón e incisivo que somos capaces de expansionar, con un vidrio en la mano y apoyados en la barra o la mesa de un bar.-
Los mejores análisis, sociales, políticos y económicos son capaces de fluir en conversaciones ahogadas entre vermoutes, cervezos y cubateos varios; éstos últimos para el que se los pueda permitir a 7 ú 8 euros en las fiestas capitalinas.- Si además te atreves con un par de tapas por la zona casco-centro y tras pagar el producto consumido, donde observas lo capaces que somos de asumir con resignación atracos económicos de éste estilo, mientras maldecimos la machacona crisis, los políticos, los bancos, etc. etc.-
Masas ingentes de aragoneses, pueblan las calles de Zaragoza, en avalanchas humanas que caminan a treinta grados, ávidos de encontrar al personaje curioso, variopinto y diferente que la fauna urbana, de vez en cuando nos presenta.- Paseas, mirar, ver, señalar, para después criticar y martirizar socialmente.- Que si todo está lleno de negros, que cuanto sudamericano, que porqué no se va por otra calle, que no me empuje, que egoístas son éstos viejos, que cuanto joven borracho y maleducado…..que esto, que lo otro………….nadie se libra de nuestro ojo crítico.- Generalmente acompañado de gesto malhumorado, donde parece que el reír está mal visto, incluso en el bus.-
Los que nos mandan, presentan sus listas para las próximas elecciones, y vuelven a estar los mismos, o casi todos.-Nos piden que les renovemos el voto, para mantenerlos en Madrid otros cuatro años, silenciando las aspiraciones de éste pueblo, cumpliendo la disciplina de los grandes partidos.- No hay que cabrear al gobierno, los zaragoneses somos majos, nobles y campechanos.-Eso sí, siempre que llevemos el cachirulo, la bota y la alfarda al hombro.- Porque cuando nos lo quitamos, pensamos , reivindicamos y exigimos se nos respete en este conglomerado de país llamado España, comenzamos a caer menos simpáticos, egoístas e insolidarios.- Menos mal que los que vigilan que éste rebaño no se vaya de las manos, otra vez el 20-11, tomarán el control para que este pueblo siga siendo simpático, solidario y campechano para el resto del país.- ¡Que majos los aragoneses! ¡Que majos los mañicos y las fiestas del pilar!.......Hasta el año que viene, mientras tanto el cierzo y la niebla nos azotarán.-
Los mejores análisis, sociales, políticos y económicos son capaces de fluir en conversaciones ahogadas entre vermoutes, cervezos y cubateos varios; éstos últimos para el que se los pueda permitir a 7 ú 8 euros en las fiestas capitalinas.- Si además te atreves con un par de tapas por la zona casco-centro y tras pagar el producto consumido, donde observas lo capaces que somos de asumir con resignación atracos económicos de éste estilo, mientras maldecimos la machacona crisis, los políticos, los bancos, etc. etc.-
Masas ingentes de aragoneses, pueblan las calles de Zaragoza, en avalanchas humanas que caminan a treinta grados, ávidos de encontrar al personaje curioso, variopinto y diferente que la fauna urbana, de vez en cuando nos presenta.- Paseas, mirar, ver, señalar, para después criticar y martirizar socialmente.- Que si todo está lleno de negros, que cuanto sudamericano, que porqué no se va por otra calle, que no me empuje, que egoístas son éstos viejos, que cuanto joven borracho y maleducado…..que esto, que lo otro………….nadie se libra de nuestro ojo crítico.- Generalmente acompañado de gesto malhumorado, donde parece que el reír está mal visto, incluso en el bus.-
Los que nos mandan, presentan sus listas para las próximas elecciones, y vuelven a estar los mismos, o casi todos.-Nos piden que les renovemos el voto, para mantenerlos en Madrid otros cuatro años, silenciando las aspiraciones de éste pueblo, cumpliendo la disciplina de los grandes partidos.- No hay que cabrear al gobierno, los zaragoneses somos majos, nobles y campechanos.-Eso sí, siempre que llevemos el cachirulo, la bota y la alfarda al hombro.- Porque cuando nos lo quitamos, pensamos , reivindicamos y exigimos se nos respete en este conglomerado de país llamado España, comenzamos a caer menos simpáticos, egoístas e insolidarios.- Menos mal que los que vigilan que éste rebaño no se vaya de las manos, otra vez el 20-11, tomarán el control para que este pueblo siga siendo simpático, solidario y campechano para el resto del país.- ¡Que majos los aragoneses! ¡Que majos los mañicos y las fiestas del pilar!.......Hasta el año que viene, mientras tanto el cierzo y la niebla nos azotarán.-
La solución es, aparentemente sencilla: de la misma forma que cuando vamos al supermercado elegimos el producto que más nos conviene entre la multitud de ofertas, o el banco o caja de ahorros que mejor nos trata, con los políticos hay que hacer lo mismo: pasar de los grandes partidos y valorar la conveniencia de votar a alguno pequeño que se comprometa con los valores a los que nos adscribimos. Si ese movimiento se generalizara, tendríamos la oportunidad de comprobar si otra política, otra forma de actuar, otro mundo, es posible...
ResponderEliminarUn saludo. JL Pueyo