Ejemplo de empresario de éxito, cuna del buen hacer, generador de empleo y según dicen además con alto grado de satisfacción entre sus empleados; el señor Roig, presentando los brillantes resultados de su cadena de distribución, con cerca de 500 millones de euros de beneficio, ¡enhorabuena!...se ha despachado con unas declaraciones por lo menos llamativas, como suele hacer cada año éste hombre, que parece se erige como “gurú” económico con gran acierto en la predicción de las malas noticias.-
Dice que debemos copiar e implantar en nuestra economía, como bastión de crecimiento, “la cultura del esfuerzo chino”.-
Naturalmente intuyo que dicha cultura de esfuerzo, se refiere dirigida a los asalariados en general.-No creo dirija sus miras, a grandes empresarios, ejecutivos bancarios, políticos profesionales, ni miembros de la realeza con turbios manejos económicos.-
Y yo le pregunto al Sr. Roig, ¿Cuáles son las bases del esfuerzo chino? ¿Las jornadas laborales ilimitadas? ¿La carencia de derechos sociales del trabajador? ¿La inexistencia de sindicatos ni comités de empresa? ¿Las oscuras transacciones de compra venta de negocios, siempre con dinero en efectivo?
Yo a lo que creo que se refiere, es a implantar en la mente, la idea, desde pequeñitos a nuestros niños, que vienen al mundo para trabajar de sol a sol, sin protestar, agachados o erguidos, con jornadas de 12 o 14 horas, siempre sumisos al patrono, sin queja, sin réplica, siempre sonriendo y asintiendo con la cabeza.-
Predispuestos plenamente al sacrificio laboral, sin dolor de espalda, sin estados depresivos, sin ningún tipo de absentismo laboral, justificado o no.- Esa es la cultura del esfuerzo que quiere implantar el Sr. Roig, pero no se equivoque , dicha cultura no es china, ya la tenía implantada mi padre, pero luchó por que sus hijos y sus nietos tuvieran acceso a un estado de bienestar social y laboral, que no distinguiera entre trabajadores asalariados y ciudadanos en general.-Nos convencieron que no era delictivo ni ilegitimo, reclamar el derecho al descanso, al salario justo que te facilitara el acceso a las sanidad, la educación y otros estados de bienestar social.-
No era la cultura china, ¡no!...ya la teníamos aquí hace 30 años.-
Dice que debemos copiar e implantar en nuestra economía, como bastión de crecimiento, “la cultura del esfuerzo chino”.-
Naturalmente intuyo que dicha cultura de esfuerzo, se refiere dirigida a los asalariados en general.-No creo dirija sus miras, a grandes empresarios, ejecutivos bancarios, políticos profesionales, ni miembros de la realeza con turbios manejos económicos.-
Y yo le pregunto al Sr. Roig, ¿Cuáles son las bases del esfuerzo chino? ¿Las jornadas laborales ilimitadas? ¿La carencia de derechos sociales del trabajador? ¿La inexistencia de sindicatos ni comités de empresa? ¿Las oscuras transacciones de compra venta de negocios, siempre con dinero en efectivo?
Yo a lo que creo que se refiere, es a implantar en la mente, la idea, desde pequeñitos a nuestros niños, que vienen al mundo para trabajar de sol a sol, sin protestar, agachados o erguidos, con jornadas de 12 o 14 horas, siempre sumisos al patrono, sin queja, sin réplica, siempre sonriendo y asintiendo con la cabeza.-
Predispuestos plenamente al sacrificio laboral, sin dolor de espalda, sin estados depresivos, sin ningún tipo de absentismo laboral, justificado o no.- Esa es la cultura del esfuerzo que quiere implantar el Sr. Roig, pero no se equivoque , dicha cultura no es china, ya la tenía implantada mi padre, pero luchó por que sus hijos y sus nietos tuvieran acceso a un estado de bienestar social y laboral, que no distinguiera entre trabajadores asalariados y ciudadanos en general.-Nos convencieron que no era delictivo ni ilegitimo, reclamar el derecho al descanso, al salario justo que te facilitara el acceso a las sanidad, la educación y otros estados de bienestar social.-
No era la cultura china, ¡no!...ya la teníamos aquí hace 30 años.-
Perdón: hace bastante más de treinta años que se aprobaron los trienios "ya pocos sabemos lo que es eso", el contrato fijo etc.Hace casi treinta años un sindicalista llamado Nicolás Redondo, dimitió como diputado, por aprobar las Cortes el despido libre, no me quiero olvidar de Marceino Camacho el de lo jerseys, ejemplo de austeridad, vivió siempre en un piso pequeño. Desde entonces se nos está poniendo cara de chinos, y, los sindicalistas viviendo en duplex, coleccionistas de relojes, consejeros de entidades financieras etc etc.
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