Hemos sido ciudadanos rurales a mucha honra, durante 23 días seguidos, hemos fiesteado, bebido cerveza, intercambiado grandes conversaciones de terraza, bar y plazas, buenas cenas con amigos, despertares con cansancio del calor y el adenoma, grandes risas impulsados por buenos chistes, hemos visto vacas, sudado numerosas camisetas..........porque nó? nos hemos criticado, nos han criticado; y sin embargo aquí estamos, enteros y dispuestos a comenzar con la rutina laboral, afortunada en los tiempos que corren-Los cincuentenos , hablamos, contamos como eran nuestras fiestas, criticamos a los jóvenes por lo que "beben", bueno mas bien por "cuanto beben" y vemos algunas diferencias entre nuestras primeras peñas y las actuales, en las nuestras cantábamos canciones de Labordeta, La Bullonera mezcladas con algo de Luis Aguile y Manolo Escobar, ahora peñas de chavales de catorce años, te despiertan sobresaltado a las siete de la mañana de la hamaca de mi terraza, entonando himnos franquistas bien coreados, pues nada mas de lo mismo, bueno miento, ahora en las carrozas no solo reivindican los jóvenes, tambien los de 60 años suben a las mismas a pedir concentración a coste cero.....ya saben "cero-cero" como la San Miguel, pues perfecto, a los 18 los 20/40 o los 60 la reivindicación de la sociedad hay que mantenerla viva...que cada uno comparta la que quiera, pero que no desaparezca...a mi no me molesta, como no me molesto el controvertido y criticado pregón de las fiestas de Hijar...es más por primera vez le vi con contenido e imaginación y sentido del humor, parece ser que eso sí molesto a algunos.....suelen ser esos que no compran en Ikea, porque dicen que es de "izquierdas"......ya saben......por lo de la "Republica Independiente de su casa"....¡pais! que diria Forges...y otra cosa, conseguimos fiestear con catalanes sin ni siquiera hablar de toros.-
El mundo por Montera Capitulo primero Amanece en Puebla del Duque, un municipio de Aragón, el treinta de noviembre del año 1933; mañana plomiza, de frescor y humedad mezclados, convirtiendo el cierzo suave, en un aviso atenuado del frio invernal y lluvioso que en éstas tierras se prodiga, alternando alguno seco cargado de hielos (chupones o carapitéeles) que fiel a su cita anual suelen comenzar su presencia, para la Inmaculada. - Lentamente, comienza la actividad, los carros cruzan la plaza y la calle mayor en dirección a los campos de extrarradios, Camino del Duque, el Bolar, la huerta los pochos, los tres caminos, la foladaza; la remolacha está esperando en los campos de pequeños minifundistas, las manos secas y regadas de cribazas, de los hombres y sus mujeres, mientras arrean las mulas que tiran de carros con ruedas de madera y llanta de hier
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