Un tiempo de silencio, da para mucho, ya que los hechos cotidianos se producen y suceden de forma vertiginosa.-La cuestión económica sigue con deterioro imparable, las calles ya están tomadas por mareas de indignados que nada tienen que ver con aquel movimiento del 15M, que desde luego quizás sirvió para anticiparse a los hechos que se producirían con el paso del tiempo.-La calle sería tomada de forma continua por diversos colectivos de trabajadores inimaginables en otras épocas (maestros, médicos, bancarios y hasta jueces).-Estoy englobado en el de los bancarios, y jamás pensé que este sector tan privilegiado en materia laboral, con su horario y remuneración, pudiera llegar un día a verse amenazado de forma tangible y real por el creciente y demoledor avance del desempleo y progresiva destrucción de la tan afamada antes “clase media” que indudablemente basada en su estabilidad, contribuyó al desarrollo y crecimiento de otros sectores inmobiliarios, consumo, etc. y en definitiva...
Susurros al oido, desde la palabra, como arma contra el desaliento